ELECCIONES, CRÍTICAS Y ALGUNAS PETICIONES

MUY PERSONALMENTE: FACULTAD DE SOCIOLOGÍA

Román Yauri, Iván*

Yo:

No quiero hablar de aspectos de tipo “técnico” ni normativo, ya que nunca me interesé de revisar la ley universitaria ni otros documentos referentes a la estructura de gobierno dentro de la universidad y mucho menos dentro de mi facultad, a mi manos llegaron algunos documentos importantes de lo cuales tomé algunos puntos imprescindibles para no hundirme en el mar de la ignorancia. Creo que soy un alumno “normal” al que le interesa su carrera y no escapa a la vida “pagana” que nos brinda el Jr. “Catalina Wanka”.

Elecciones:

Cuando se realiza el “Magno” acontecimiento de la elección de un nuevo decano, las aguas calmadas, en las que fluyen los docentes y alumnos tienden a enturbiarse y a volverse torrentes y se tornan como un río al cual ha caído un huaico y lo llena de lodo y piedras, este fenómeno “natural” tiene victimas y gente que se salva de “morir”, algunos se quedan sin casa, otros sin contrato a otros le arrancha sus asignatura (como aquellos docentes que siempre enseñan lo mismo), pero sin duda los que sufren mayores consecuencias (...) son los estudiantes; su voz no se escucha, sus opiniones y puntos de vista pierden todo valor y fuerza, sus representantes (que son como los sacos de arena en la rivera del río) son minimizados y ridiculizados, quizás ellos y los alumnos tienen la representatividad de una pelota de “tenis”,con la cual se pretende echar abajo una fortaleza.

Yo quisiera pensar que “Dios” quiere que estos fenómenos sucedan para que se rediman sus siervos “perdidos” y rebeldes, sin embargo Dios no toma en cuenta estos asuntos, ya que son los mismos actores de la facultad quienes cargan pesadas piedras, y llevan grandes maquinarias para provocar este “Huaico”. ¿Por qué lo hacen?... no podría contestar con exactitud esta cuestión casi filosófica y con categoría de paradigma científico, solo atinaré a decir que “Parsons” ilumina mi mente y evidencia los intereses de varios grupos que ostentan el poder en la facultad, detrás de esas corbatas y “ternos (quizás) mal planchados” existen intereses que nunca podré comprender.

Críticas:

No quiero pecar de chismoso, pero como no creo en el pecado, lo haré, alguna vez escuché a algunos de mis docentes proferir ciertos sagrados salmos (aquí algunos):

“Si ése entra de Decano…yo me largo”

“El voto estudiantil… es como un saludo a la bandera”

“¿¡Quieren que un terrorista sea su Decano!?”

(Bueno, hay más fuertes pero por respeto a mi facultad no los citaré)

En verdad no comprendo por que se embarran a los estudiantes con resentimientos personales ¡NO TIENEN DERECHO DE HACERLO!, en nuestra propia casa se matan y apuñalan (Por la espalda) uno a uno…y los hijos… ¡pobrecitos!, solamente son simples observadores de cómo sus padres y hermanos mayores se golpean y se denigran y claro que no nos podemos meter en esos líos por que se nos puede castigar con el látigo de la “nota parcial”, si nuestro hogar se destruye internamente no estaremos preparados para aguantar otros posibles fenómenos como el de la “ACREDITACIÓN DE LA FACULTAD”, simplemente este arrasará a la facultad y dejará a sus principales victimas (los alumnos) en el más completo desamparo.

Peticiones:

Yo quiero que nuestra casa se mantenga ( por lo menos en apariencia) en orden y que el nuevo decano no nos haga rememorar la celebérrima frase de Alan García Pérez a la que posiblemente parafrasearemos: “Nuestras autoridades nos están hueveando”, también quisiera decirles a nuestros docentes que le pongan esfuerzo y ganas a sus cátedras, que nos enseñen con sus “brillantes mentes” y que no piensen con el bolsillo ó el hígado, que no nos abandonen por habernos portado mal, castigándonos con su negativa a dictar la cátedra, que no nos dejen trabajos que no van a leer, que comprendan que llevamos varios cursos y no “Uno sólo”, que la época del dictado ya paso de moda, que no es mejor el trabajo y/o examen con más hojas y que recuerden que alguna vez (los estudiantes) nos sentaremos en los mismos lugares en los que hoy se sientan ustedes y pisaremos sus huellas y mencionaremos sus nombres con una sonrisa en los labios y no con una lisura en ellos.

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*Estudiante de sociología de la Universidad Nacional del Centro del Perú